Pan nuestro de cada día…


pokemon

Un día más, cumpliendo religiosamente con el pan nuestro de cada día, aparecen en los periódicos noticias sobre nuevas detenciones de políticos. Hoy toca la corrupción urbanística del caso Pokemon; la operación que parecía ser un asunto de municipios gallegos, se extiende ya por diferentes municipios de otras dos provincias, Asturias y  Girona.

Y los ciudadanos, aquí seguimos, estupefactos ante la extraordinaria miseria ética de nuestros representantes, esos que elegimos para que llevaran a cabo una profesión virtuosa al servicio del bien común y que se empeñan en ensuciar un día tras otro.

En DSC, ya insistimos hace poco más de una semana, ante las nuevas informaciones del caso Bárcenas, en la idea de la sanción social a la espera de que llegue la sanción penal. Hoy, gracias a plataformas como Twitter yFacebook, ésta, se hace más palpable pero es necesario que se dé un paso más y no se quede en críticas 2.0.

Que todos aquéllos que nos roban con desvergüenza, sabedores de que en muchos casos la sanción penal no llegará, sean repudiados políticamente; un ejemplo claro de esto, es la retirada efectuada en Palma, de la calle que daba nombre a sus Duques, dando la espalda simbólica y públicamente a aquél que se lucra indebidamente de su posición. Además, no podemos ni debemos permitir porque es,  simplemente, insultante para una sociedad avanzada, que los debates en el Parlamento sean: tu robas y tu más.  Debemos obligar, con nuestra movilización, a los partidos políticos a echar a todos los mequetrefes indecentes, que albergan en sus filas, para poder llegar al poder.

Desde DSC creemos que la mejor forma para el cambio que necesita nuestra sociedad, es educar y concienciar en una cultura cívico política, que sí está asumida en otros países de nuestro entorno. Todos, individualmente, debemos cumplir además de las leyes jurídicas, unas leyes ético cívicas y, solo así conseguiremos ser fuertes como sociedad y conseguir, unidos, la regeneración política acabando de una vez por todas con tanto ladrón inmerecido.

¿Tú que opinas?

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